La Gran Estafa, Bankia

Una institución pública fundada el 3 de diciembre de 1702, que tenía como objetivo mantener una obra social. Aguanto guerras civiles, la invasión de Napoleón, con Estados Unidos, la perdida de America. Llegaron los nuevos directivos políticos y su gestión fue puesta en duda desde hace años.
A esta Institución la han inducido que se convierta en un banco ya sin interés social.  Y para colmo de los pobres españoles, en ese proceso pillan las manos trabajadoras de miles de ahorradores con el fraude de las preferentes.

Un insulto a la inteligencia y al sentido común la administración de una importante Entidad Financiera de este país llamada Bankia.
La Gran Estafa sufrida por los ciudadanos españoles por esta entidad ronda la locura de la indecencia en la administración del dinero ajeno, consentido y permitido por el poder político y la no actuación del poder judicial. Que sus socios solo hacen llorar y aquellos que confiaron en que las personas que administraban sus ahorros eran honestas, pero estas han demostrado la indecencia de su comportamiento.

El Código de Comercio define claramente como debe de actuarse y como todos los contratos tienen que tener fecha de vencimiento, igualmente el Código Civil define los contratos dolosos o mejor dicho, contratos con intención de engaño. Este hecho se ve claramente cuando a una persona se le presenta a la firma un contrato con letra del 6  que no conoce sus términos y como se le puede robar legalmente en dicho documento.
El problema es, cuando se pone en cargos de dirección de Entidades Financieras a personas que no están preparadas en la administración de la economía financiera de terceros y tampoco tienen un comportamiento ético y moral que corresponda al mismo, esto último con mucha más abundancia que el primero.

En la vanidad de los ineptos se les ha permitido todo tipo de operaciones y desmanes, hasta la compra de un Banco en Florida, con un 21 % de mora y un 78% de riesgo al ladrillo de EEUU, cuando en mercado se derrumbaba. Pero hay que hacerse el chulo y comprar aunque para ello se pierda la mano derecha, como comprar la inmobiliaria mexicana Su Casita (otro puro desastre).

Así es, como actuaron los dirigentes de entidades Financieras mandadas por políticos y amigos de estos. Mientras, Fernández Ordóñez el Gobernador del Banco de España, miraba como volaban los pájaros sobre los árboles en las cercanías  del banco, sin darse cuenta que la contabilidad de Bankia era un chiste de mal gusto, algo inmoral. Igual que permitir  con su consentimiento la venta de preferentes a particulares, productos con un nivel de sofistificación muy elevado para personas normales. A los que han realizado quitas de un 40 %, para su posterior conversión en acciones.
Así comenzaron y así fueron los comportamientos de aquellos administradores que han obligado a inyectar dinero del erario público por importe de 22.424 millones de €, para que la entidad no quiebre.

El presidente de Bankia, José Ignacio Goirigolzarri, asegura que la inyección de capital a los bancos se ha realizado para “salvar a los depositantes y no a los accionistas ni a los banqueros”.
D. José, ¿sigue pensando que somos idiotas?, no se puede rescatar a alguien que no tiene responsabilidad en el funcionamiento de un banco, los depositantes no tienen responsabilidad de ningún tipo, al contrario solo tienen la irresponsabilidad por haber confiado sus ahorros a semejantes incompetentes ineptos y sinvergüenzas. No se ha realizado la gran aportación del estado para salvar a los depositantes como Ud. dice, sino para salvar sus puestos de poder y a los amigos del desastre. Si se hubiera tenido la intención de salvar a los depositantes, solo habría hecho falta nacionalizar Bankia, hacer una ampliación de capital por parte del Estado, para el pago de preferentes y demás subordinados sin tener la necesidad de estafar ni a personas ni accionistas, con pérdidas del 99,8% para los primeros accionistas, que mantienen todavía esos títulos.
Unos 300.000 clientes de productos híbridos de Bankia han sido estafados, formada por Caja Madrid, Bancaja, La Caja de Canarias, Caixa Laietana, y las cajas de Rioja, Avila y Segovia, pueden solicitar el arbitraje desde el pasado 18 de abril y hasta el próximo 30 de junio, con independencia de que los hayan canjeado o los vayan a canjear por acciones, bonos o depósitos.

Hay muchas maneras de matar. “Pueden meterte un cuchillo en el vientre; quitarte el pan; no curarte de una enfermedad, meterte en una mala vivienda; empujarte hasta el suicidio, torturarte hasta la muerte por medio del trabajo; llevarte a la guerra, o….. hacerte socio de Bankia.
El descalabro de Bankia en bolsa el jueves, del 51,43%, que llevó su precio hasta 0,68 euros, por debajo del valor 1,35 fijado por el FROB, y Bankia mantiene su postura de que no necesitará nuevas inyecciones de capital para afrontar este nuevo coste. ¡Eso lo veremos!, mañana empieza a cotizar la nueva Bankia. Entran en juego más de 11.000 millones de acciones, valoradas en 15.540 millones, de las que el Frob posee el 70%. Este será el primer día de una nueva etapa, en la que Bankia debería cambiar todo, su actitud y comportamiento, hasta de nombre.

En Bankia se ha producido la mayor destrucción de valor que ha habido en España en los últimos tiempos.
¿Cárcel para los que se han equivocado? El pueblo tiene ganas de que alguien vaya a perpetuidad a las profundidades de las mazmorras por su comportamiento.

© Marzo 2013 The Elephant

Normas de la Banca Medieval        La Taula de Canvi o el banco público medieval

Fuente de origen   La La Taula de Canvi o el banco público medieval
El liberal escandalizado
Viernes 30 Nov 2012     Publicado por JAC46 en Social  @ellibelaresc

Me fui anoche a dormir con la preocupación de los desahucios en el cuerpo, con la injusticia que estos banqueros salvajes están aplicado a gran parte de la sociedad española, con la sensación que nos están dando por saco, que los estamos rescatando con nuestros dineros y ellos “nos rescatan” con el suyo. Me propuse escribir una gacetilla sobre el tema sabedor de que mis conocimientos sobre economía, movimientos bancarios y macroeconomías son más que limitados. Pero sí sé que por mucho que los responsables lo quieran negar hay muy pocas dudas de que los bancos han sido los grandes causantes de la crisis que vivimos. Por su desnaturalización al convertirse en financiadores de las burbujas especulativas en lugar de financiar la actividad realmente productiva; por la acumulación gigantesca de riesgo que han generado y porque, al saltar todo eso por los aires, se han descapitalizado o quebrado y han cerrado el grifo de la financiación a consumidores y empresas.

Pero yo voy a lo mío y lo que quería era escribir sobre el compromiso que los banqueros tendrían que haber adquirido con la sociedad y el trato que en caso de incumplirlo tendrían que haber recibido y no han recibido. Eso sí, salvadas las distancias. Y en mi duermevela me acordé de la lectura que hace un tiempo hice de La Catedral del Mar, de Ildefonso Falcones. Del argumento me quedo sólo con lo que nos interesa: el sistema financiero medieval y la llamada Taula de Canvi.

En el siglo XV las operaciones mercantiles tenían un carácter particular sin intervención alguna de ninguna institución municipal, y ello ocasionaba numerosos inconvenientes, quiebras de los cambistas, desajustes en el cambio de la moneda, morosidad en los pagos, devolución de los depósitos, usura. Es por ello que los magistrados de las ciudades de Barcelona (1401) y Valencia (1407) acordaron solicitar al rey la constitución de un organismo que pusiera fin a este estado de cosas, y se creara una institución que sirviera de depósito de alhajas, cambio de moneda, deposito de fondos públicos y que regulara la actividad mercantil tan intensa que había en las dos ciudades como resultado del aumento del comercio y de los viajes a ultramar. Este es el origen de la institución conocida como la “Taula de Canvis” o banco público de carácter municipal, pues la institución estaba regida por el “Consell de la Ciutat” (lo que hoy sería el Ayuntamiento).

Esta institución era gobernada por dos regidores y dos escribanos encargados de la contabilidad, cuya obligación era anotar en un libro todos los depósitos o entradas y salidas tanto de efectivo como de joyas. El dinero se guardaba en una caja de madera. El nombre de la institución le viene porque las operaciones se realizaban sobre una mesa.

En esta actividad mercantil había prestamistas, cambistas y mercaderes-banqueros. Los primeros realizaban préstamos al consumo a corto plazo. Sus clientes eran personas del pueblo o pequeños burgueses, pequeña nobleza, campesinos y clérigos. El receptor del dinero entregaba en garantía objetos personales: vajilla, vestidos, herramientas…

Los cambistas se dedicaban básicamente al cambio de moneda. También comerciaban con metales preciosos: los recibían de su clientela en forma de lingotes o vajilla, determinaban el precio de estos metales y ejercían una importante influencia sobre las fluctuaciones del mercado del oro y la plata. Estos cambistas también aceptaban depósitos y reinversiones para préstamos: eran auténticos banqueros. Todos los mercaderes tenían una cuenta en un cambista, ya que éste les facilitaba operaciones a crédito, adelantaba capital y realizaba transferencias mediante escrituras.

Los mercaderes-banqueros realizaban negocios financieros a gran escala al tiempo que controlaban otros negocios, como la fabricación de tejidos. La familia Médici de Florencia es un ejemplo de esta élite financiera medieval.

Esta actividad mercantil era muy seria y los fraudes, engaños, estafas, falsificación de moneda o impagos eran severamente castigados por la ley. Los banqueros que engañaban, la pagaban. Veamos algunos casos de esta legislación bancaria de la taula:
El 13 de febrero de 1300 se estableció que cualquier banquero que se declarara en bancarrota sería humillado por toda Barcelona por un voceador público y forzado a vivir en una estricta dieta de pan y agua hasta que devolviese a sus acreedores la cantidad completa de sus depósitos. El 16 de mayo de 1301 se decidió que los banqueros estarían obligados a obtener fianzas y garantías de terceras partes para poder operar, y a aquellos que no lo hicieran no se les permitiría extender un mantel sobre sus cuentas de trabajo. El propósito de ello era señalar a todo el mundo que estos banqueros no eran tan solventes como aquellos que usaban manteles, es decir, que estaban respaldados por fianzas. Cualquier banquero que rompiera esta regla (por ejemplo, que operase con un mantel, pero sin fianza) sería declarado culpable de fraude.

Los banqueros, también entonces eran como ahora, pronto empezaron a saltarse la normativa y a engañar a sus clientes. Debido a esos engaños, el 14 de Agosto de 1321 se estableció que aquellos banqueros que no cumpliesen inmediatamente sus compromisos, se les declararía en bancarrota y si no pagasen sus deudas en el plazo de un año, caerían en desgracia pública, lo que sería pregonado por voceros por toda Cataluña. Inmediatamente después, el banquero sería decapitado enfrente de su mostrador y sus propiedades vendidas para pagar a sus acreedores. En otros casos se le arrancaba la lengua y se le amputaba el brazo. La falsificación de moneda se castigaba con la amputación de la mano derecha, la hoguera o la deportación.

En la actualidad, a los grandes banqueros, a los culpables del despropósito nacional, no sólo no les pasa nada, no sólo se convierten en multimillonarios, y otros convictos hasta se atreven a presentarse a elecciones autonómicas, sino que encima les hacemos la manicura y se la pagamos con dinero público. Los banqueros españoles están perdiendo ya los niveles mínimos de responsabilidad, decencia y vergüenza. Ha cambiado el código penal, y también el cumplimiento de las penas, pero los bancos siguen en bancarrota y no pasa nada, los banqueros quedan inmunes, sanos y salvos, y cada mañana, cuando se levantan, miran con estoicismo el cielo, se relajan con un bostezo y marchan al trabajo como si nada. La vida sigue, también el asombro.